El 31 de agosto de 2020 será una fecha inicial histórica a recordar por todos los habitantes de Cartago y Pereira. La reunión ordinaria del concejo de la ciudad del sol más alegre de Colombia, sesionó con la presencia de los mandatarios de ambas ciudades en un grato ambiente integracionista planteando la posibilidad de que Cartago entre a ser parte del Área Metropolitana Centro Occidente que actualmente conforman Pereira, la Virginia y Dosquebradas, donde se proyecta incluir adicionalmente otras localidades como Alcalá, Ulloa y Santa Rosa. Al día siguiente el alcalde Maya presentó la invitación formal para la inclusión de Cartago.
Felicitaciones para estos dos alcaldes que acompañados por sus equipos de trabajo, muestran con estas iniciativas que no están dormidos en el sopor de la pandemia y buscan mecanismos de desarrollo y progreso regional. Todos los concejales que intervinieron manifestaron finalmente su apoyo al proyecto en la seguridad de que beneficiará a la ciudad y a sus vecinos, idea que se ha manejado por muchos años en un sueño muy generalizado que con voluntad política se puede hacer realidad.
Sin duda habrá opositores locales pero más externos, especialmente de aquellos que han mantenido el norte del valle en el olvido. Sería recomendable que se incluyera en la integración con Cartago su inmediato vecino de Ansermanuevo que se interconecta con importantes poblaciones norteñas jalonando su desarrollo, además comunicado por excelente carretera con la Virginia el otro socio Metropolitano. Estoy seguro de que la consulta popular que se debe comenzar a socializar, incluso con estos comentarios, arrojará un mayoritario SI.
Mas cuando el alcalde Carlos Alberto Maya de Pereira que ha demostrado ser contundente y firme en sus iniciativas, como ser el primero en Colombia al prometer que pagaría los servicios públicos a los menos favorecidos al comienzo de la pandemia, asegura ante el concejo y comunidad de Cartago que esta integración no le costará nada a la ciudad exceptuando lo que proporcionalmente deba aportar a los proyectos de beneficio común, conservando cada mandatario su respectiva autonomía. Esperamos que la nulidad parcial de su elección del Tribunal Administrativo de Risaralda, que impugnará, no afecte este proyecto integracionista, impulsado por las dos alcaldías.
Son muchas las situaciones conjuntas que deben resolverse para el bien regional, como lo relacionado con el peaje (llamado el muro de Berlín), la puesta en marcha del aeropuerto de Cartago, otro sueño norte vallecaucano ya sea como manejo de carga y como alterno en casos de emergencia en Pereira; la seguridad y salud de sus habitantes permanentes y transitorios, la limpieza de sus ríos y del divisorio la Vieja, donde se provee el acueducto cartagueño, los proyectos del malecón al margen de sus cauces tutelares, la preservación en conjunto del paisaje cultural cafetero, etc., etc.
En cuanto al peaje, lo más conveniente a mi criterio para una verdadera integración sería su abolición y en última instancia la exoneración al menos para quienes demuestren que deben viajar frecuentemente entre estas localidades, y en cuanto al aeropuerto de Santa Ana, además de lo indicado facilitaría la exportación de los productos de la gran reserva ganadera y agrícola del norte del Valle.
El gran desafío que generó la pandemia al retrasar el desarrollo del país en más de una década, exige innovación y cambios para dinamizar la necesaria reactivación económica y atemperar el creciente descontento social que se manifestaba por todo Latinoamérica incluso antes de este fenómeno y que acabó de complicar gravemente las cosas. Llegó la hora de actuar en conjunto con visión regional recordando que con la magia de la sinergia uno más uno puede dar tres o más.
Aclarando que ¨Sinergia procede de un vocablo griego que significa cooperación. El concepto es utilizado para nombrar a la acción de dos o más causas que generan un efecto superior al que se conseguiría con la suma de los efectos individuales.¨
Nota:
Interesantísimo para quienes gustamos del ajedrez, el símil en la narración del creativo compañero columnista Diego Matis, en este medio el pasado 6 de septiembre, titulada «Enroque largo«, y ojalá el jaque mate lo dé la verdad que añoramos en estas épocas difíciles ante los ojos de toda Colombia, y que la decidida apertura integracionista Metropolitana planteada por los dos mandatarios vecinos no termine en las consabidas tablas que en efectos prácticos de esta partida sería en nada.
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