Tal como ocurre con Pechy, la mascota oficial de los XXI Juegos Departamentales y IV Paradepartamentales Cartago 2017, en el billar también han adoptado su propia muñeca, y todos quieren tomarse fotos con ella.
Es Tatiana Isabella Quiceno Giraldo, una pequeña rubia de apenas 11 años, cumplidos el pasado 13 de noviembre. Representa al municipio de Argelia, pero parece que tuviera la camiseta de todos quienes compiten y asisten a ver las competencias en Los Ángeles y en el Gran Paraíso.
Sus amplias gafas dejan divisar sus hermosos ojos azules y la ternura que despierta al ver con el taco. Es la gran sorpresa del certamen, ya que en una partida de más de 6 horas eliminó en la clasificación a octavos de final a una rival de Yumbo y a la palmirana Adriana Durán –campeona nacional-, que le llevan mucho tiempo de ventaja.
“Es increíble, cuando la dejé en el club de billares, porque yo también tenía que ir a jugar, iba perdiendo 3-1, y cuando llamé de nuevo me dijeron que había empatado 4-4, excelente para un jugador en este deporte.
Lleva apenas un año de practicarlo, y es su primera competencia importante, pero no se amilana ante rivales de mayor trayectoria. “Es muy duro competir con los adultos, pero es una experiencia muy buena, que me va a enseñar mucho para mi carrera”, afirma.
Francisco Javier Galindo, presidente de la Liga, sostiene que “es la reina de los Juegos, la más pequeña y un verdadero prospecto de nuestro deporte, estoy seguro que va a llegar muy lejos”.
El gusto por el deporte le viene de sangre. Su madre, Blanca Liliana Giraldo, no solo es billarista, sino la monitora de esta disciplina en Argelia, en el programa Semilleros Deportivos para la Paz que impulsa la gobernadora Dilian Francisca Toro Torres. Prácticamente la niña se crió entre mesas y bolas, y al igual que ella, juega con maestría el billar pool bola 8, bola 9 y bola 10.
Nunca se han enfrentado, pero si las cosas salen como van hasta el momento, madre e hija podrían encontrarse en instancias definitivas. “Si eso se da, que gane la mejor”, dice sonriente la niña. “Me gusta el billar porque es bueno y mi mamá lo practica”, dice emocionada la niña.
Blanca Liliana, por su parte, no oculta su alegría al ver el crecimiento deportivo de la niña. “Me tiene sorprendida, porque es la primera vez que participa en un torneo grande ha sido la estrella, acá me he convencido que está para grandes cosas. Ha despertado una gran admiración en toda la gente, que la busca en las dos sedes del campeonato dónde esté jugando”.
La familia la apoya totalmente, en la liga, el presidente Francisco Javier Galindo; Harold Rodríguez, representante de los deportistas, manifiestan que va a llegar muy lejos.
Su mamá ya se la imagina jugando frente a las grandes campeonas del mundo: Jane Leed, Allison Fischer, Kelly Fischer, ya la veo en esas”.
Tatiana cumplió 11 años el pasado 13 de noviembre y acaba de pasar a sexto grado en el Gilberto Alzate Avendaño. Lo más sorprendente es que juega con las élites.
No acabamos de apagar la grabadora y ya dos delegados le piden un espacio para la foto. Ella es la otra Pechy, la atracción del billar de los Juegos Departamentales.
Fuente: Indervalle
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