El Gobernador Sigifredo Salazar Osorio destacó el trabajo conjunto que se está adelantando con funcionarios del vecino departamento de Valle para minimizar las posibilidades de peligro en la zona de Chorritos y Villanueva.
En una jornada de más de 6 horas de trabajo, funcionarios de las corporaciones autónomas regionales CVC y Carder, las Alcaldías de La Celia y El Águila, Cruz Roja, Bomberos, Defensa Civil y la Coordinaciones Departamentales de Gestión del Riesgo de Desastres de ambos departamentos, se realizó un recorrido por la ladera del río Cañaveral desde la vereda Chorritos de La Celia hasta el corregimiento Villanueva, de El Águila (Valle).
La inspección de campo se realizó durante las horas de la mañana y el mediodía. En horas de la tarde se concluyó con una reunión en la que se determinaron acciones para poner en marcha alertas tempranas con la comunidad y evitar una tragedia con pérdidas humanas en caso de presentarse una creciente torrencial por el río Cañaveral, que separa a los departamentos de Valle y Risaralda, entre los dos municipios mencionados.
“Se está trabajando articuladamente porque la amenaza del río Cañaveral no solo afectaría a 26 viviendas del lado de Risaralda, 12 de ellas en un grado de exposición alta; sino que pondría en riesgo los habitantes del corregimiento Villanueva, de El Águila”, indicó Diana Carolina Ramírez, coordinadora departamental de Gestión del Riesgo de Desastres de Risaralda.
Según el alcalde de ese municipio nortevallecaucano, Andrés Herrera, son cerca de 100 familias la que correrían riesgo en el corregimiento Villanueva. “Hay que trabajar articuladamente, mancomunadamente, porque lo que nos divide es un río, ese es el límite imaginario; pero nuestra población es la que está ahí en riesgo de una creciente súbita”, manifestó el mandatario.
Para alertar a la comunidad, los habitantes de Chorritos fueron dotados con radios de comunicación por parte de la Gobernación de Risaralda. Además, la Cruz Roja de este departamento autorizó que se use su frecuencia de radio para se dé aviso a los habitantes de Villanueva, cuando se vea una creciente del río.
“Ya tuvimos esa experiencia en 2015 y funcionó afortunadamente. Esperamos que no suceda nada, pero que si llega a presentarse el sistema nos funcione de nuevo”, dijo Jhon Jairo De la Pava, director operativo de la Cruz Roja Risaralda. Adicionalmente, la Gobernación de Valle envió una alarma de alto alcance, que será activada por la Policía en Villanueva, en caso de ser necesario para que la comunidad reaccione.
Finalmente, las corporaciones autónomas de ambos departamentos coincidieron que las acciones definidas son las que se deben fortalecer, puesto que la situación no da lugar a una mitigación del riesgo.
“El riesgo acá es inminente, estamos en una situación donde el riesgo no es mitigable. Tenemos que pasar ya a una situación de vulnerabilidad y manejo del riesgo, acá tenemos un río con un movimiento en masa de 200.000 metros cúbicos en potencia, por eso tenemos que planificar es acciones de reacción para atender situaciones de riesgo, información oportuna, alertas tempranas y pensar en una reubicación definitivamente a largo plazo”, concluyó Edwin Alexander Serna Alzate, director de la Seccional Norte de la CVC.
Dato de interés
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