Auxiliares del área de salud, de enfermería, médicos, técnicos operativos y secretarias, que bajo la figura del encargo pasaron a ocupar cargos de coordinación o en área especializadas dentro de la estructura del Hospital Universitario del Valle, hacen parte del grupo de 61 trabajadores que a partir de ahora volverán a sus puestos de origen.
Se trata de una medida adoptada por las directivas del centro asistencial, en cabeza de la gobernadora Dilian Francisca Toro, con la que se pone fin a una serie de encargaturas, algunas hasta por más de 20 años, que desde el punto de vista legal no se ajustan a su definición. Además de que por Ley no podrían exceder los 9 meses de encargo, muchas de estas personas no cumplían con las funciones ni la definición de los nuevos puestos de trabajo y además representaban altos costos para la nómina del hospital.
Se encontró que algunos funcionarios que fungían como coordinadores no tenían personal a su cargo, es decir, se coordinaban a sí mismos.
Juan Carlos Corrales, gerente del Hospital Universitario del Valle, explicó que como parte del Plan de Austeridad, que busca racionalizar los gastos y el equilibrio financiero de la institución, los análisis detectaron esta situación que impacta de manera seria las finanzas del hospital. La medida permite un ahorro inicial de al menos 3.000 millones de pesos para el hospital.
“Una persona que se desempeñaba como auxiliar y que tenía un sueldo aproximado de 1’200.000 pesos mensuales, era a título de encargo, coordinador con un salario aproximado de 4’300.000 pesos, eso es un incremento notorio y sustancial para las finanzas de las institución, pero resulta que en esa coordinación no se ejercía funciones como tal”, explicó el gerente Corrales.
Indicó que es necesario tener en cuenta esta situación porque “aparte de que se pasó a una encargatura, donde no se cumplían las funciones en forma adecuada, adicionalmente a ello se hizo por un tiempo muy prolongado y esto tiene impacto notorio en el tema de finanzas instituciones”.
De esa manera, acatando las directrices de la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, como presidente de la junta directiva del hospital, las resoluciones que se emitieron el pasado mes en las que se da por terminado los encargos otorgados en la planta de cargos del hospital a 61 servidores públicos, se hicieron efectivas el día de ayer.
“Son decisiones que hay que tomar, de lo contrario, no será posible sacar adelante al Hospital Universitario del Valle, pero esto no significa en ningún momento que hemos violado ninguna norma ni hemos afectado los derechos de los empleados, sencillamente son decisiones que hay que tomar para poder lograr el equilibrio”, insistió el gerente Corrales.
El funcionario señaló que la medida hace parte de la medidas internas que deben ser adaptadas en la búsqueda de salidas a la crisis del hospital y en este sentido había encargos con tiempos muy prolongados, de muchas vigencias y lo que se hizo fue tomar la determinación de suspender esos encargos, pero pensando en el área misional.
“Consideramos que un alto porcentaje de estos cargos, el hospital no los requiere en el sitio en que estaba el encargado, pero si generaba un costo importantísimo para la institución, Por eso, siendo potestad de la representación legal se tomó la decisión, en ningún momento tratando de violar los derechos de ninguno de los trabajadores, pero hace parte de las medidas internas para poder lograr un equilibrio económico”, señaló el gerente.
Frente a los efectos de la medida, indicó Corrales, que esta hace parte de los ajustes institucionales para poder evitar la liquidación del HUV. “Suspender unos encargos no significa que el empleado se va de las institución, sencillamente se reintegra a su sitio original e inicial de trabajo”, concluyó.
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