Vía Cerritos-La Virginia: esfuerzos coordinados para evitar colapso vial y económico

La estabilización de la vía Cerritos – La Virginia, en el departamento de Risaralda, ha movilizado a múltiples entidades públicas y privadas en un esfuerzo conjunto para evitar el deterioro de una arteria vial estratégica para el transporte de carga y la movilidad regional. Este corredor, vital para conectar Pereira con el suroccidente del país, enfrenta graves riesgos estructurales que amenazan con afectar la economía y seguridad vial.

Problemas identificados: el talud y el drenaje como factores de riesgo

Un estudio técnico reciente identificó un drene colmado, responsable de la acumulación de aguas lluvias que debilitan la estructura del talud y de la carretera. Como resultado, la vía muestra coronas sobre el pavimento, un síntoma de daño estructural avanzado que exige acciones inmediatas.

Entre las principales afectaciones se encuentra el riesgo de hundimiento en la banca y el colapso del pavimento, lo que podría interrumpir el flujo vehicular y causar serios perjuicios económicos en la región.

Soluciones técnicas para estabilizar la vía

Para abordar este desafío, las entidades participantes en la mesa técnica del pasado 25 de noviembre, entre ellas INVÍAS, DIGER, FINDETER y la CARDER, definieron un plan de acción con dos etapas clave:

1. Estabilización del talud:
   • Uso de anclajes helicoidales como medida temporal para sostener la estructura del terreno.
   • Rehabilitación del sistema de drenaje para asegurar la evacuación eficiente de las aguas lluvias y prevenir daños futuros.
2. Obras definitivas:
   • Intervenciones estructurales para consolidar el terraplén original y las áreas adyacentes del talud.
   • Instalación de vallas de seguridad en las zonas afectadas y reductores de velocidad para minimizar las vibraciones que podrían agravar los daños.

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Compromiso interinstitucional y enfoque sostenible

Cada entidad involucrada asumió un rol clave en la implementación de las soluciones:

• INVÍAS: asumirá la responsabilidad de liderar la organización y liderará la ejecución de las obras, también la gestión de permisos necesarios para el desarrollo de los trabajos. Asimismo, la instalación de vallas de seguridad.
• DIGGER: Implementará medidas de seguridad vial, como reductores de velocidad, y realizará un monitoreo constante de las condiciones del tramo.
• CARDER: Supervisará el cumplimiento de normativas ambientales, garantizando un enfoque sostenible en todas las intervenciones.

El director de la CARDER, Julio César Gómez Salazar, expresó su agradecimiento por el compromiso de todas las entidades involucradas, destacando la importancia de actuar con celeridad para preservar la movilidad y la seguridad vial en este importante corredor.

Impacto económico y social del cierre de la vía

Un inesperado cierre de la vía Cerritos – La Virginia tendría consecuencias significativas para el transporte de carga y la movilidad diaria de cientos de usuarios particulares. Este corredor es esencial para mantener el dinamismo económico de la región y garantizar la conectividad entre municipios y departamentos.

La interrupción de esta vía estratégica afectaría:

• El transporte de mercancías desde y hacia el suroccidente colombiano.
• La economía local, debido a mayores tiempos y costos logísticos.
• La movilidad de trabajadores y estudiantes que utilizan esta ruta diariamente.