ARCHIVO. Obras en el Hospital de Alta Complejidad de Risaralda | Foto. Gobernación
La Gobernación de Risaralda enfrenta una situación de incertidumbre respecto al financiamiento del Hospital Regional de Cuarto Nivel «Carolina Larrarte – Nuestra Señora de Los Remedios», uno de los proyectos más ambiciosos y estratégicos para el sector salud de la región.
Este jueves se llevará a cabo una reunión clave entre las autoridades locales y el Ministerio de Salud para esclarecer el estado actual de los recursos destinados a la construcción de la obra, luego de que el Gobierno Nacional anunciara un recorte presupuestal de 12 billones de pesos, afectando a diferentes ministerios y proyectos regionales.
El gerente del proyecto, Fredy Arias Herrera, señaló que aún falta el desembolso de 400 mil millones de pesos correspondientes a las vigencias de 2023 y 2024. Dichos fondos están actualmente en reserva en el Ministerio de Salud, aunque los pasos para su desembolso quedaron definidos con la firma de un convenio a finales de 2024.
“Estos dineros están en reserva en el Ministerio de Salud y los pasos para su desembolso quedaron definidos con la firma del nuevo convenio que se efectuó al finalizar el año anterior”, explicó Arias Herrera.
Hasta la fecha, el Gobierno Nacional ha girado 200 mil millones de pesos, lo que representa el 33% de los recursos comprometidos, con 67 mil millones en ejecución para la primera fase de la obra, mientras que 133 mil millones permanecen en una Fiducia a la espera de su asignación.
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La fase inicial del proyecto comprende la construcción del área administrativa y el edificio de consulta externa, infraestructura que beneficiará a más de 3.5 millones de personas en seis departamentos del país: Caldas, Quindío, Risaralda, Chocó, Tolima y municipios del norte del Valle del Cauca.
El hospital se perfila como una institución de alta complejidad médica, diseñada para cubrir las crecientes demandas de atención especializada en una región que históricamente ha carecido de infraestructura hospitalaria avanzada.
El gobernador de Risaralda, Juan Diego Patiño Ochoa, ha manifestado su compromiso total con el avance del proyecto, calificándolo como una prioridad para el desarrollo regional. Sin embargo, el panorama actual exige una solución inmediata por parte del Gobierno Nacional para evitar afectaciones en el cronograma de obras.
«Necesitamos claridad sobre el cronograma de desembolsos y la garantía de que los recursos comprometidos se mantendrán intactos», sostuvo el gobernador.
La situación refleja la necesidad de un diálogo fluido y acciones concretas por parte del Ministerio de Salud para evitar que la región pierda la oportunidad de consolidar una obra de impacto estratégico para su sistema de salud.
El cierre financiero del hospital superó los 700 mil millones de pesos, una inversión que busca elevar los estándares de atención médica en el Eje Cafetero y zonas aledañas. Pese a los retos actuales, las autoridades locales mantienen la expectativa de avanzar conforme a los tiempos establecidos.
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