En el operativo se capturó a su máximo cabecilla alias “Diego”
La Unidad de Investigación Criminal de Infancia y Adolescencia de la (SIJIN), en desarrollo de actividades tendientes a contrarrestar el accionar delictivo de las bandas delincuenciales que afectan la seguridad ciudadana en el área metropolitana, efectuaron en las últimas horas la operación “Horizonte”, mediante la ejecución de catorce diligencias de registro y allanamiento en el barrio Villavicencio de esta localidad, dejando como resultado la captura de siete adultos y tres menores de edad aprehendidos, integrantes de la banda delincuencial “La 28”, dedicada a la distribución de estupefacientes en este sector de la ciudad.
La presente investigación se desprendió el día 18 de octubre del año 2015, en donde mediante información aportada por fuente humana, quien aduce tener información importante, acerca de una banda delincuencial que comercializa y expende sustancias estupefacientes por la carrera séptima entre calles 7 y 8 del barrio Villavicencio de la ciudad de Pereira, así mismo agrega que uno de los integrantes de esta banda delincuencial lo utilizó para transportar sustancias alucinógenas a diferentes partes de esta municipalidad, al igual que a otros adolescentes para comercializar dicha sustancia en este sector.
De lo anterior, los suscritos funcionarios de Policía Judicial realizaron labores de verificación donde se logra constatar que efectivamente se vienen presentando conductas punibles que afectan la salud pública, en especial la comercialización de sustancias estupefacientes, por lo tanto, adelantaron labores de vecindario en el barrio Villavicencio de la ciudad de Pereira, en donde se percibe un grupo de personas que se reúnen en la esquina de las carreras sexta y séptima con calles 5 y 6; lo cual les permitió establecer y evidenciar, la presencia de dichas personas a cualquier hora del día, los cuales están atentos a la llegada de las personas que arriban al sector y algunos de ellos se encargan de atender a los que se pueden denominar “Clientes”, suministrándoles a cambio de dinero sustancias estupefacientes.
Bajo la coordinación de la Fiscalía Seccional Unidad Especial Antinarcóticos de Pereira, se da apertura al proceso investigativo, con el fin de desarrollar el programa metodológico; así es como desde el mes de diciembre del año 2015, se venían adelantando labores investigativas tales como vigilancia y seguimiento a personas y cosas en aras de identificar, individualizar, judicializar y capturar a las personas encargadas de la actividad ilícita que se investiga. Dentro de las actuaciones realizadas estuvieron la entrevista a Fuente Humana; posteriormente los registros en video de la actividad relacionada con la comercialización de sustancias estupefacientes, cuyo sector de injerencia se ubica en la calle quinta entre carreras sexta y séptima del barrió Villavicencio; así como de algunos inmuebles y personas encargadas de ejecutar dichas conductas, y entrevistas a personas que se denominan “compradores”, de sustancias estupefacientes.
Dentro del proceso investigativo se pudo establecer que su fuente de financiación es la comercialización de estupefacientes conocidos como Marihuana Regular y Bazuco, liderados por Diego Fernando Agudelo Flórez alias “Diego”, quien era el encargado de coordinar toda la actividad ilícita de venta y distribución del estupefaciente y mayor beneficiario económico de esta actividad ilegal; su trabajo principal como Líder de Expendedores era supervisar y controlar el trabajo de los “Expendedores” de sustancias estupefacientes al igual que a los “Campaneros”; así mismo se logró evidenciar que las personas que se dedican a la comercialización de las sustancias estupefacientes, en su mayoría son habitantes del mismo sector; estas personas intervienen en el desarrollo de dicha actividad, de tal forma que cada uno de los integrantes cumpla una función específica, así:
Expendedores: Son las personas encargadas de la comercialización de la sustancia estupefaciente de manera directa con el consumidor.
Estas personas se turnan entre sí para ejercer la comercialización de la sustancia estupefaciente, para lo cual se dividen por días y dependiendo su rendimiento por semanas; rendimiento que es medido según la cantidad de ventas que realice y por su agilidad en evitar la incautación o perdida de la sustancia estupefaciente que le es entregada para la comercialización, realizando esta actividad en diferentes horas del día, todo dependiendo de la demanda de consumidores que se esté presentando, siendo los antes descritos los que ejercen directamente la actividad ilícita.
Cada expendedor se ubica en el punto establecido (escaleras que están ubicadas entre las carrera 6 y 7), una vez allí ejerce la actividad ilícita desde horas de la mañana hasta altas horas de la noche; inicialmente reciben la denominada “Bomba”, (bolsa plástica que contiene dosis de estupefacientes listas para ser comercializadas), luego estas personas, generalmente se aprovechan del entorno en que se encuentran para esconder la sustancia estupefaciente; para tal fin utilizan huecos, bordo de las escaleras, vegetación entre otros. Este tipo de “Caletas” son usadas primordialmente para evitar que las Patrullas de Policía que ejercen labores de Vigilancia en el sector, los sorprenda portando sustancia estupefaciente y dificulta significativamente la incautación de las mismas.
Campaneros: Son personas que cumplen un papel fundamental en la comercialización de la sustancia estupefaciente, ellos son los encargados de alertar oportunamente a los expendedores sobre la presencia de las autoridades Policiales en el sector, con el propósito de que logren ocultarse y no sean sorprendidos en flagrancia ejerciendo la actividad ilícita. Los “campaneros” se ubican en puntos estratégicos del sector de la calle 5 entre carreras 6 y 7 del barrio Villavicencio, para vigilar todas las vías de acceso a la zona.
Dichas actividades quedaron evidenciadas en las actividades de Vigilancia y Seguimiento desarrolladas en la presente Indagación, lo que deja en claro cómo se desarrolla la comercialización de las sustancia estupefacientes por parte de esta banda delincuencial, en algunos casos se logró evidenciar que esta actividad era ejercida por tres (03) MENORES DE EDAD los cuales estaban al servicio de esta Organización Criminal. Así mismo se logró establecer que la sustancia estupefaciente que esta organización comercializaba, era entregada a los vendedores a un precio fijo y estos posteriormente en su reventa obtenían sus propias ganancias, dependiendo la eficiencia del vendedor, de esta misma manera le es entregada determinada cantidad de estupefacientes.
En la cadena criminal, participan dentro del eslabón principal, toda vez que son los que económicamente, con el producto del expendio, financian el actuar delictivo de todos sus integrantes; estas personas son los responsables del almacenamiento, distribución y comercialización de sustancias estupefacientes en el barrio Villavicencio y Santander, los cuales son comercializados entre los $1.200 y $2.000 por dosis. Cabe resaltar que estas personas durante varios años han liderado el “monopolio” del expendio de alucinógenos en esta jurisdicción, lo que los posicionó como un grupo delincuencial con experiencia y de gran reconocimiento.
Así mismo dentro de los aspectos de interés se encuentran:
Organización Delincuencial dedicada al tráfico local de estupefacientes, el uso de menores en la comisión de delitos y porte ilegal de armas.
Organización delincuencial con más de 10 años de injerencia en esta zona, ejerciendo control territorial y monopolio por la venta de estupefacientes.
Utilizaban un punto estratégico de difícil acceso y control de las autoridades Policiales para la comercialización de los estupefacientes.
Elementos materiales probatorios que fueron llevados ante el Juez Penal Municipal de Garantías de la ciudad, expidiendo las órdenes de captura de las personas inmersas en dicha actividad delincuencial, por los delitos de concierto para delinquir agravado y fabricación, tráfico o porte de estupefacientes; logrando de esta manera y tras un trabajo investigativo de siete (07) meses, mediante la ejecución de 14 diligencias de allanamiento y registro, la judicialización, captura y desarticulación de la banda delincuencial “La 28” que opera en este sector, haciendo efectivas seis (06) órdenes de captura, tres (03) órdenes de aprehensión y una (01) captura en flagrancia producto de los allanamientos a quien le fueron hallados quinientas setenta y nueve (579) papeletas de sustancia estupefaciente Bazuco y la incautación de $ 2.550.000 en billetes de diferentes denominaciones.
Personas Capturadas:
NOMBRES
ALIAS
ROL
DELITOS
Diego Fernando Agudelo Flórez
“Diego”
24 Años
Cabecilla principal
Coordinaba toda la actividad ilícita de venta y distribución del estupefaciente y mayor beneficiario económico de esta actividad ilegal
Maicol Deiby Arenas Betancur
“El Calvo”
25 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector
Yeison Fernando Ortiz Acosta
“Yeison”
24 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector.
José Manuel Hernández Ocampo
“Careniña”
22 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector.
Jovanny Santana
“Fifi”
28 Años
Campanero
Encargado de alertar oportunamente a los expendedores sobre la presencia de las autoridades Policiales
José Fernando Higuita Osorio
“Higuita”
40 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector y campanero.
Adolescentes Aprehendidos:
“Libaniel”
17 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector y campanero.
“Santiago”
16 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector y campanero.
“Nano”
17 Años
Vendedor de sustancia estupefaciente
Encargado de la venta de estupefaciente en el sector y campanero.
En el desarrollo de este proceso investigativo la Policía Metropolitana de Pereira, puso a disposición toda su capacidad en medios tecnológicos y talento humano con el propósito de contrarrestar el tráfico de estupefacientes en este sector, mejorando la seguridad en el entorno y ratificando el compromiso de erradicar sitios conocidos como mitos de inseguridad.
Fuente: Policía Metropolitana de Pereira
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