La semana pasada el gobernador de Risaralda, Víctor Tamayo, ordenó higienizar y hacer todas las adaptaciones necesarias con el fin de tener la clínica lista para su funcionamiento cuando la ocupación de UCI llegue al límite.
El mandatario afirmó a Caracol Radio que «los equipos como el personal médico ya están preparados para iniciar su trabajo inmediatamente se cope la capacidad de las Unidades de Cuidados Intensivos«.
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«Los equipos están en muy buenas condiciones de funcionamiento y eso nos permite tener una reserva para que en cualquier circunstancia, que uno no la descarta, podamos echar mano de esos instrumentos que nos permita atender a nuestros pacientes y no tener que buscar otro departamento a dónde remitirlos, porque las condiciones de tiempo y lugar dilatan la solución de un problema de salud”, señaló el gobernador.
El porcentaje de ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos en Risaralda es de casi un 90%.
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