Menores rescatados en Santa Rosa de Cabal se encuentran bajo el cuidado de sus abuelos maternos

Procuraduría solicitó un informe a Comisaría de Familia tras caso de Maltrato Infantil en Santa Rosa de Cabal.

La Procuraduría General de la Nación ha tomado cartas en el asunto luego de que se conociera el escalofriante caso de maltrato infantil en el municipio de Santa Rosa de Cabal, donde dos menores, de 5 y 6 años, fueron víctimas de violencia física por parte de su madre y padrastro.

La Delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, la Adolescencia, la Familia y la Mujer, Viviana Mora Verbel, ha solicitado a la Comisaría de Familia un informe detallado sobre las acciones tomadas para proteger y restablecer los derechos de estos niños.

El caso, que tuvo lugar el pasado 30 de enero, cobró relevancia pública tras la viralización de un video que mostraba los desgarradores maltratos a los que fueron sometidos los menores. La madre de 26 años, identificada como Mitchell Yuliana Flórez Martínez, y su pareja de 28 años, Daniel Ochoa, fueron capturados y cobijados con medida de detención carcelaria por los delitos de tortura agravada y lesiones personales.

Según las autoridades, los niños fueron rescatados en estado deplorable, con signos evidentes de maltrato físico y quemaduras en diversas partes de sus cuerpos. El coronel Héctor Daniel García, comandante de Policía de Risaralda, informó que los menores, residentes en el barrio San Vicente, fueron encontrados atados de pies y manos, con hematomas y quemaduras, tras recibir una alerta de un ciudadano que escuchó sus gritos desesperados.

La Fiscalía ha detallado que el menor de cuatro años había sido mantenido con las manos atadas durante largos periodos de tiempo. En el proceso legal, la madre fue imputada como cómplice de los delitos de tortura agravada y lesiones personales, mientras que el padrastro enfrenta los mismos cargos en calidad de autor. Ambos permanecen en prisión preventiva.

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Por su parte, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en Risaralda ha confirmado que los menores se encuentran bajo el cuidado de sus abuelos maternos, recibiendo atención física y psicológica para su recuperación. Claudia Serna, directora del ICBF en la región, ha lamentado el estado de salud de los niños, pero ha asegurado que se está trabajando para garantizar su bienestar y restablecer sus derechos.

Este caso ha generado indignación y conmoción en la sociedad, destacando la importancia de proteger a los niños y niñas de cualquier forma de maltrato y violencia. La Procuraduría continuará vigilante de este caso para asegurar que se tomen todas las medidas necesarias para proteger los derechos de los menores afectados.