En acciones de inspección, vigilancia y control, donde se intervinieron los hoteles del centro de la ciudad, la Administración Municipal, por medio de la Secretaría de Salud, logró decomisar 128 colchones que no cumplían con las exigencias sanitarias que requieren para ser usados para al descanso de los huéspedes.
Dentro de las características de los colchones que fueron retirados se encontraban que la mayoría no tenían ningún tipo de protección o fundas necesarias para evitar el contacto de fluidos que se consideran peligrosos, otros estaban completamente rotos, y los demás tenían manchas que evidenciaban una clara contaminación.
De igual forma, funcionarios de la dependencia retiraron de los establecimientos fundas, sabanas y demás elementos de lencería, más de 200, que también presentaba un deterioro importante y comprometen la salud de la población. Empresas Públicas de Armenia EPA, apoyó el retiro de los colchones y su posterior proceso de desnaturalización.
El inadecuado estado de estos elementos aumenta la proliferación de ácaros, chinches, pulgas, garrapatas, entre otros, agentes que por su proximidad a la piel pueden transmitir enfermedades. De igual forma se previene el riesgo biológico por el contacto directo con fluidos que allí quedan depositados.
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