Luto por el fallecimiento de Rodrigo Marín Bernal

El Tiempo | Bogotá D.C. | 30 DIC 2014 – 10:05 pm

El líder ‘azul’, oriundo de Chinchiná (Caldas), era abogado de la Universidad Nacional y fue uno de los hombres más cercanos a la casa Gómez.

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En sus inicios políticos, en Manizales, Marín Bernal defendió los postulados del expresidente Laureano Gómez y fue un severo crítico de la dictadura del general Gustavo Rojas Pinilla.

Según Ómar Yepes, copartidario y paisano de Marín Bernal, el exministro fue uno de los “combatientes jóvenes” de esa dictadura. “Entiendo que se tuvo que ir de Manizales porque estaba en la mira del Servicio de Inteligencia Colombiano, por su actividad contra Rojas”, dijo Yepes.

Posteriormente, Marín Bernal se inclinó hacia el ideario de Álvaro Gómez, hijo de Laureano, con quien fundó el Movimiento de Salvación Nacional.

Por varios años, el exministro fue congresista y un destacado miembro de las comisiones terceras, encargadas de asuntos económicos.

Su cercanía con estos temas lo llevó a ser ministro de Trabajo durante el gobierno de Julio César Turbay (1978-1982) y de Desarrollo en el de Belisario Betancur (1982-1986).

Esta última cartera también la ocupó durante el mandato de Ernesto Samper (1994-1998), en el cual también fue Ministro de Transporte y embajador de Colombia en España.

Precisamente, Samper lo recordó ayer por su “honestidad” y “afabilidad”, dos “virtudes” de Marín Bernal. “Era una persona proverbialmente simpática y horizontalmente eficiente”, le dijo Samper a EL TIEMPO.

Esposa costarricense

El exministro se casó con la costarricense Ana Cecilia Quiroz, quien es conocida en su círculo cercano como ‘Nany’. La pareja se conoció en 1959, cuando ella representó a su país en el Reinado del Café, durante una feria de Manizales.

Años después, Nany fue conductora de programas de televisión.

Según Carlos Uriel Naranjo, exrepresentante y cercano a Marín Bernal, con Ana Cecilia “no tuvo hijos, pero a los de ella –Karina y Roy– los consideró como suyos”.

En septiembre de 1992, lanzó su precandidatura a la Presidencia arropado por líderes no solo del conservatismo sino también de algunos sectores del liberalismo.

“Tenía una simpatía proverbial y la virtud del chispazo en el momento oportuno; una memoria privilegiada y una lealtad absolutamente vertical”, dijo Samper de Marín Bernal.

Yepes lo recordó como un destacado conservador, partido del cual también fue su presidente.

“Fue un hombre que se caracterizó por su honestidad y transparencia, que entendió que la función pública había que ejercerla bajo esos postulados, esto fue lo que lo hizo sobresaliente en la vida política del país”, dijo Naranjo.