En una decisión crucial para mejorar la infraestructura hídrica de la región, el Comité Técnico Departamental de Proyectos del Sector de Agua Potable y Saneamiento Básico ha aprobado los estudios y diseños para el Acueducto Regional del Norte de Caldas. Este proyecto, liderado por la Secretaría de Vivienda de Caldas a través del Plan Departamental de Agua, beneficiará a los municipios de Aranzazu, Salamina, Filadelfia y La Merced, abarcando un total de 50 veredas.
La aprobación de este proyecto marca un hito fundamental para la región debido a los graves problemas de calidad del agua y el desabastecimiento que afectan a estos municipios, especialmente durante las épocas de sequía. La infraestructura existente no es suficiente para garantizar el suministro de agua potable segura y constante, lo que ha generado una demanda urgente por soluciones que ahora comienzan a materializarse.
El nuevo acueducto, cuya construcción incluirá una bocatoma en la quebrada La Sirena de Aranzazu, permitirá distribuir agua potable a más de 50 veredas. Entre los principales beneficiarios se encuentran:
Este sistema no solo mejorará el acceso al agua, sino que también brindará infraestructura moderna y eficiente para garantizar la potabilidad y calidad del suministro. Como lo señaló Yenni Henao, alcaldesa de La Merced, «nuestro municipio se verá beneficiado con agua potable para las veredas El Limón y El Yarumo. Este es un aporte muy importante para nuestros municipios».
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El Acueducto Regional del Norte de Caldas contempla una serie de obras claves para asegurar el correcto funcionamiento del sistema. Estas incluyen:
El alcalde de Aranzazu, Sebastián Merchán Zuluaga, expresó su satisfacción con el proyecto, destacando la importancia de esta inversión: “Cada municipio va a invertir recursos importantes en estos estudios y diseños, previstos para siete meses. Este plan suplirá la necesidad de agua potable y segura en esas 50 veredas”.
El costo total de los estudios y diseños del proyecto asciende a $1,638 millones, lo que incluye la interventoría necesaria para garantizar que las obras se ejecuten correctamente y dentro de los plazos estipulados. Estos estudios tendrán una duración aproximada de siete meses, tras lo cual se espera que las obras puedan comenzar para materializar este vital proyecto de infraestructura.
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