El Tiempo | Bogotá D.C. | 21 MAY 2015 – 11:11 am
El Arzobispo de Cali, junto a los obispos de Buga, Buenaventura, Buga, Palmira y Cartago llamó la atención de los vallecaucanos frente al proceso electoral que se avecina.
Insistieron en la necesidad de reflexionar sobre las características que deben acompañar a todos los candidatos a ocupar la gobernación, alcaldías, concejos y Asamblea.
“La transparencia de vida y la honestidad en su actuar como personas y como ciudadanos en el ejercicio de los distintos cargos realizados, han de ser sus principales baluartes”, señala esta reflexión firmada por el Arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve; por los obispos de Buga, José Roberto Ospina; de Palmira, Edgar de Jesús García; de Cartago, José Alejandro Castaño; de Buenaventura, Héctor Epalza y el obispo auxiliar de Cali, Luis Fernando Rodríguez.
El mensaje de los obispos está inspirado en el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia redactado en El Vaticano en el 2005. Describe lo que denomina el componente moral de la representación política.
En el Compendio se insiste en el compromiso de compartir el destino del pueblo y en buscar soluciones a los problemas sociales. En los candidatos debe analizarse su espíritu de servicio, paciencia, modestia, moderación, caridad y generosidad.
Otro aspecto a tener en cuenta en la próxima jornada electoral tiene que ver con la pulcritud y legitimidad de la contienda.
‘Entre las deformaciones del sistema democrático la corrupción política es una de las más graves porque traiciona al mismo tiempo los principios de la moral y las normas de la justicia social; compromete el correcto funcionamiento del Estado, influyendo negativamente en la relación entre gobernantes y gobernados; introduce una creciente desconfianza respecto a las instituciones públicas, causando un progresivo menosprecio de los ciudadanos por la política y sus representantes, con el consiguiente debilitamiento de las instituciones’, señala el Compendio.
“No son pocas las ocasiones en que la Iglesia ha hecho sendos pronunciamientos sobre la necesidad de erradicar la corrupción en todos los órdenes, y en forma particular, en el campo de la política. Confiamos en que el voto que cada elector deposite, sea un voto voluntario, consciente, maduro, exento de presiones y libre de todo vicio que desdibuje su naturaleza”, dicen los obispos en su reflexión.
Una de las preguntas que los obispos de la región se plantean en su reflexión es qué esperar de los servidores públicos y, de nuevo, se remiten al Compendio.
‘La administración pública, a cualquier nivel -nacional, regional, municipal, como instrumento del Estado, tiene como finalidad servir a los ciudadanos: El Estado, al servicio de los ciudadanos, es el gestor de los bienes del pueblo, que debe administrar en vista del bien común’.
“Teniendo en cuenta el momento histórico que vivimos, en la encrucijada de la soñada cercanía de la cesación del conflicto armado, que ha de ser el paso para avanzar en la consolidación de la paz integral que requerimos, en donde la dignidad de todos los seres humanos, sea respetada, valorada y enaltecida por encima de intereses personales o de grupos, exhortamos a los habitantes del Valle para que asuman con entereza, responsabilidad y entusiasmo el deber ciudadano de elegir gobernador, alcaldes y miembros de la Asamblea y concejos”, dicen los obispos.
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