“En las próximas horas podríamos solicitar órdenes de captura por lo menos a los autores materiales (de la masacre), esto permitiría ir desmontando esta estructura”, indicó el general.
Penilla contó que la masacre, en la que murieron ocho personas, se pudo originar por el “vuelo” que estaba cogiendo Julio César Paz, conocido como J1, quien hacia trabajos para Los Úsuga y otras organizaciones criminales del norte del Valle y del Eje Cafetero.
“Tenemos un mapa muy claro de lo que sucedió el viernes. Sabemos que vino gente de otras regiones y que sí hay injerencia de ciertas personas de renombre relacionados con narcotráfico”, señaló el general.
J1 le hacía encargos a extraditados y a narcos que aún están en Colombia
La noche del pasado viernes (3 de septiembre) ocho hombres fueron asesinados a tiros en las afueras de Cali. La matanza ocurrió en una propiedad del corregimiento de Pance, donde los cadáveres fueron encontrados maniatados y con disparos en la cabeza después de que habitantes de la zona avisaran a las autoridades de que habían escuchado varios disparos.
Según el general, J1 le hacía encargos a extraditados y a narcos que aún están en Colombia, por lo cual “empezó a coger vuelo propio y allí vinieron los inconvenientes que derivaron en los hechos del viernes”.
Finalmente, aseguró que la Policía Nacional está en la capacidad de contrarrestar a estas estructuras criminales. “La Policía, con todo su accionar, está en condiciones de contrarrestarlos”, puntualizó.
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