El municipio de Dosquebradas y en la capital risaraldense, donde hay más de mil personas adictas a esta droga, ubicando a la región en la segunda posición con mayor consumo después de la ciudad de Armenia.
Para Maribel Restrepo, coordinadora del Observatorio, Risaralda no ha estado preparada para hacerle frente a dicha problemática puesto que hay mucha demanda de consumidores que se ven atraídos por los bajos precios que tiene la heroína en Dosquebradas, pero hay poca oferta en temas de atención.
«Cuando hay mayor demanda también hay mayor oferta. Aquí en el Área Metropolitana, sobretodo en Dosquebradas, es donde se ha permitido la venta porque ellos tienen controles internos dentro de ese mercado ilícito y son los precios más bajos de la heroína en el país y se vuelve en un atractivo para quienes caen en el consumo de estas sustancias«, manifestó Restrepo.
Te puede interesar: Madres comunitarias de Pereira exigirán las contrataciones al ICBF
Asimismo, señaló que, pese a que existe un tratamiento para superar la adicción a esta sustancia alucinógena como lo es la metadona, las graves dificultades del sistema de salud generan que este flagelo siga en aumento y que los pacientes deserten.
Por eso, pidió a las autoridades municipales y a la departamental que tomen acciones para reducir los impactos que genera el consumo de heroína en los risaraldenses y, además, generar mejores campañas de sensibilización para evitar que más personas se vuelvan adictas.
Deja tu comentario