La Contraloría Municipal de Pereira ha detectado un presunto detrimento patrimonial en el suministro de materiales destinados para la construcción de la Avenida Los Colibríes, una obra que ha estado bajo la lupa de las autoridades debido a su ejecución incompleta y su vinculación con posibles casos de corrupción. El hallazgo más reciente sugiere un mal uso de los recursos asignados para el reparcheo de vías en la ciudad, los cuales habrían sido desviados hacia la construcción de esta vía.
Desvío de recursos: un detrimento de dos mil millones de pesos
El Contralor de Pereira, Perches Giraldo, explicó que, tras una auditoría realizada al contrato de reparcheo de vías de 2023, se descubrió que parte de los materiales destinados a la reparación de las calles del municipio fueron utilizados para pavimentar la Avenida Los Colibríes. «El contrato de reparcheo incluía todos los costos, y no es aceptable que se hayan desviado materiales hacia otro proyecto», señaló el contralor, agregando que el detrimento patrimonial asciende a cerca de dos mil millones de pesos.
Ante esta situación, se solicitó a la Alcaldía de Pereira que inicie una revisión exhaustiva del contrato, a través de un peritaje que determine si se cumplió con los objetivos estipulados o si, efectivamente, los recursos se utilizaron para la obra de la Avenida Los Colibríes. Este proyecto ha sido objeto de múltiples investigaciones debido a su fase inconclusa y a la vinculación de altos funcionarios en presuntos actos de corrupción.
Implicación del exalcalde Carlos Alberto Maya y otros funcionarios
El presunto desfalco involucra a la administración del exalcalde de Pereira, Carlos Alberto Maya, quien gobernaba durante la vigencia en la que ocurrieron los hechos. Maya, junto con el exsecretario de Infraestructura, Miltón Hurtado, y los contratistas José Alberto Rojas y José Gabriel Vargas Carvajal, han sido investigados por presuntos actos de corrupción relacionados con la ejecución de la Avenida Los Colibríes.
Este caso ha puesto bajo la lupa la gestión de Maya y ha generado una fuerte indignación pública debido a las denuncias de irregularidades y sobornos relacionados con los permisos y licencias ambientales necesarios para la ejecución de la obra. Según la Fiscalía, Vargas Carvajal, junto con su socio Carlos Guillermo Suárez, habrían sobornado con 100 millones de pesos a funcionarios de la Carder (Corporación Autónoma Regional de Risaralda) para agilizar trámites ambientales.
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Contratista se entrega a las autoridades
Un nuevo avance en este proceso judicial fue la entrega voluntaria de Carlos Guillermo Suárez, socio del consorcio Prosperidad Vial Cerritos y administrador de Keiser Ingeniería SAS, quien enfrenta cargos por peculado por apropiación, prevaricato por acción, falsedad ideológica en documento público, y contrato sin cumplimiento de requisitos legales. Suárez, que formaba parte del grupo de contratistas involucrados en el proyecto, ha manifestado su intención de colaborar con la justicia.
El ente acusador sostiene que Suárez y su socio, José Gabriel Vargas Carvajal, se habrían beneficiado indebidamente de obras no planeadas en varias fases de la construcción, con lo que lograron apropiarse de recursos públicos que debían destinarse a la correcta ejecución del proyecto.
Irregularidades en la obra y desvío de recursos públicos
En las audiencias preliminares celebradas en junio de este año, la Fiscalía General de la Nación reveló que varios de los implicados en la ejecución de la Avenida Los Colibríes participaron en una red de corrupción que incluía tanto a funcionarios públicos como a contratistas. Se presume que estas personas habrían utilizado el poder de sus cargos para apropiarse indebidamente de recursos del municipio, beneficiándose de sobornos y la ejecución de obras nuevas no planeadas.
A pesar de las pruebas presentadas por la Fiscalía, la Juez Sexta con función de control de garantías de Pereira decidió dejar en libertad a José Gabriel Vargas Carvajal, aunque sigue vinculado a la investigación.
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