En medio de la nueva tragedia que golpea a la comunidad de Risaralda, el gobernador Juan Diego Patiño Ochoa ha realizado un llamado urgente al Gobierno Nacional para que se agilice el proceso de reubicación de las más de 100 familias damnificadas por la emergencia ocurrida el 8 de febrero de 2022. Esta petición cobra aún más fuerza tras confirmarse el fallecimiento de tres personas tras un nuevo deslizamiento de tierra en el mismo sector de La Esneda.
El trágico suceso, que tuvo lugar durante la mañana del sábado 4 de mayo, ha movilizado nuevamente a los equipos de emergencia y ha generado una profunda preocupación en la comunidad. Ante esta situación, el gobernador Patiño Ochoa ha manifestado la necesidad de una respuesta inmediata por parte del Gobierno Nacional para brindar una solución efectiva a esta problemática que ha cobrado vidas y generado graves consecuencias para las familias afectadas.
En palabras del gobernador, «es fundamental que el Gobierno Nacional nos brinde su apoyo para encontrar una solución a esta situación. Mientras tanto, desde la Gobernación de Risaralda y la Coordinación Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, estamos brindando todo el apoyo necesario al municipio de Dosquebradas, ofreciendo ayuda humanitaria y facilitando el transporte de las familias damnificadas hacia albergues temporales».
Además de estas acciones, el mandatario ha puesto a disposición un equipo interdisciplinario de profesionales para colaborar en las labores de búsqueda y rescate de las personas desaparecidas, así como para establecer medidas de prevención que eviten nuevas pérdidas humanas.
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Por otro lado, la Gobernación de Risaralda ha desplegado una importante asistencia en el lugar de la tragedia, proporcionando recursos técnicos y humanos para ayudar a superar la emergencia en el barrio La Esneda. Se han puesto a disposición 25 camionetas doble cabina para diversas acciones de apoyo y traslado de personas afectadas, así como para movilizar equipos de rescate y personal asistencial.
En este difícil momento, el alcalde de Pereira, Mauricio Salazar, ha expresado su solidaridad con la comunidad afectada y ha liderado acciones de prevención en diferentes puntos de la ciudad. Instó a las autoridades locales y nacionales a unirse en busca de soluciones concretas para evitar nuevas tragedias y proteger la vida de los ciudadanos.
La tragedia en La Esneda ha generado un profundo impacto en la región, recordando la urgente necesidad de tomar medidas efectivas para reducir los riesgos asociados a fenómenos naturales y proteger a las comunidades vulnerables. En momentos como este, la colaboración entre autoridades y ciudadanos se vuelve fundamental para enfrentar los desafíos y trabajar en la construcción de un futuro más seguro y resiliente.
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