CiudadRegion.com | Cartago | 07 ABR 2015 – 9:45 pm
Con el propósito de iniciar desde temprana edad la prevención en la aparición de la tuberculosis TBC, la Secretaría de Salud adelanta acciones educativas que ayuden a identificar los síntomas de la afección en los colegios Ciudadela Cuyabra, Ciudadela del Sur y Los Quindos.
Estar atentos a la tos intensa por más de una semana, dolor en el pecho, tos con sangre o flema, fiebre y pérdida de peso, fueron algunos de los consejos entregados a los alumnos durante estas jornadas educativas.
El año anterior, fueron confirmadas en la ciudad un total de 172 personas enfermas de tuberculosis
Aproximadamente unos 2000 niños niñas y adolescentes se verán beneficiados con esta iniciativa que motivando una reflexión profunda entre los estudiantes, y ayudándolos a identificar el buen estado de su salud, el de su familia, compañeros y demás círculos en los que se desenvuelvan.
El año anterior, fueron confirmadas en la ciudad un total de 172 personas enfermas de tuberculosis, de las cuales 14 eran niños y adolescentes, equivalentes al 8 % de los casos en general. En lo que va corrido del 2015 se ha reportado a la dependencia el caso de una niña de cinco años con la enfermedad y que tuvo contacto directo con su mamá que también fue diagnosticada con TBC.
Esta afección de tipo contagioso aumenta su posibilidad de transmitirse cuando las personas enfermas de tuberculosis sin tratamiento tosen, estornudan, hablan o escupen, lanzando al aire microorganismos conocidos como bacilos de la tuberculosis. Basta con solo inhalar unos pocos bacilos para resultar infectado. Una persona no tratada puede infectar más o menos 10 a 15 personas al año y el riesgo aumenta cuando el sistema inmune está débil.
Para la Secretaría de Salud todas las acciones que se realicen en prevención de estas enfermedades en niños niñas y adolescentes, son una forma clara de promover el bienestar de la población, trabajar por la reducción de las cifras, y contribuir al mejoramiento en la calidad de vida de personas y familias, que tengan o hayan tenido las enfermedades.
Cuando se enseña a un niño o joven a prevenir desde sus actividades la aparición de enfermedades, se vincula un nuevo actor que ayudará a replicar la información y será el primero en ayudar a mejorar la calidad de su familia y su comunidad.
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