Ejemplo de honestidad: taxista devolvió más de $2 millones de pesos que una mujer dejó en su carro

Un taxista en Armenia, se convirtió en un ejemplo de honestidad al devolver una cartera con varios millones de pesos a una pareja que utilizó el servicio en su móvil.

Carlos Julián Ríos, mencionó que una mujer olvidó su cartera dentro de su carro luego de utilizar el servicio desde la comuna Uno, sur de Armenia, con destino a la Urbanización Mercedes del Norte en la comuna 10 de la capital del Quindío.

Hacia las 3:30 de la tarde de este miércoles en el barrio Guaduales de la Villa, el conductor del móvil 0511 de la empresa Cootrafun recogió a una pareja en el populoso barrio y los lleva hasta el norte de la ciudad.

Sin embargo, al bajarse del vehículo, la señora olvidó una pequeña cartera que contenía tarjetas de crédito, documentos y más de $2 millones de pesos en euros y moneda colombiana.

El conductor sale de Mercedes del Norte y se ubica frente al CAI el Pórtico para hacerle limpieza al taxi cuando se encuentra una cartera de color rojo en la silla trasera.

Según relató, la abrió para saber a quien pertenecía y buscó documentos, encontrando una cédula que pertenecía a la mujer que había transportado momentos antes. Al interior de la cartera también encontró dinero enrollado, además de las otras pertenencias.

Posteriormente, el taxista recogió un servicio en la locomotora, frente al museo Quimbaya, y lo llevó a la Universidad del Quindío. Tan pronto quedó libre, se dirigió a la vivienda donde dejó a la pareja propietaria de la cartera roja y le entregó sus documentos y pertenencias a la señora.

Al parecer, la mujer aún no se había percatado de que se le quedaron los documentos en el vehículo de servicio público.

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Más tarde en la noche, se conoció que tras haber conseguido el contacto del taxista, el esposo de la señora dueña de la cartera lo llamó y ofreció darle una recompensa por el gesto de honestidad que demostró al hacer la devolución del dinero y documentos.

Sin embargo, el taxista Carlos Ríos no aceptó y les dijo que «lo hizo por su propia voluntad y por sentir paz interior con él y con Dios, además por los valores que le inculcaron sus padres en casa».