Se puede perfectamente acordar ya con los indígenas la presentación al Congreso, la próxima semana, del proyecto de ley que las haga funcionar de pleno derecho y con la administración autónoma, por parte de sus legítimas autoridades, de los recursos otorgados.
“El sentido común es el menos común de los sentidos” es una frase que no sé quién la inventó. Y no recurro a Google -el moderno libro gordo de petete- porque me mandan a Wikipedia… y ya sabemos que ahí entra cualquier ignorante y agrega sus errores. Pero no hay que ser una lumbrera para entender su significado, especialmente en momentos en que todo el mundo pierde la cordura, como en la minga indígena en el sur-occidente colombiano (del cual no hacemos parte: somos puro, mondo y lirondo centro-occidente y Cartago es la mamá), que amenazaba con extenderse a la Costa Caribe.
El remedio está en la Constitución de 1991. Su artículo 286 establece que los territorios indígenas son entidades territoriales (ETIs) al igual que los departamentos, los distritos y los municipios. Y los artículos 329 y siguientes hablan de cómo pueden organizarse y cuáles serían sus funciones. Desafortunadamente, la L.O.O.T. -Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial- sancionada por el presidente Santos en Cartagena el 28 de junio de 2011 bajo la radicación 1454 de esa fecha, no las reglamentó y se limitó a las otras tres entidades, aunque posibilitó la creación de otras dos unidades administrativas, aprobadas en esta misma Constitución vigente: Regiones y Provincias, que posteriormente podrán elevarse a la categoría de entidades territoriales.
Se puede perfectamente acordar ya con los indígenas la presentación al Congreso, la próxima semana, del proyecto de ley que las haga funcionar de pleno derecho y con la administración autónoma, por parte de sus legítimas autoridades, de los recursos que se les otorguen. De acuerdo con el artículo 330, los territorios indígenas estarán gobernados por consejos conformados y reglamentados según los usos y costumbres de sus comunidades y ejercerán las funciones que, a renglón seguido, establece la Carta Magna. Santo remedio. Pero gastamos casi un mes viendo por los noticieros de televisión el tire y afloje pendejo entre los caciques y la desteñida ministra del interior… a la que le falta mucho pelo pa´moña.
Esta posibilidad la recordó un académico por algún noticiero nacional de radio en el transcurso de la semana que pasó, cuyo nombre no recuerdo. Pero claro que el “susquihabla” tampoco es que sea conocido y reconocido a nivel nacional como experto en ordenamiento territorial. Solo ustedes, pacientes lectores, se han aguantado por años mi cantaleta sobre este tema… que ya va pareciendo eterna. Dijo ese medio de comunicación que este señor había enviado a la Casa de Nariño esta propuesta. Falta ver si siquiera la leyeron, porque si no figura en la “gotha” de los sabios de Bogotá, ni bolas le paran. (Gotha era el almanaque de la aristocracia europea y el que no figurara allí era un snob, un sin nobleza).
Y hablando de la L.O.O.T., allí está plasmada, en el artículo 5, la posibilidad de crear la COT -Comisión de Ordenamiento Territorial- municipal, que estará integrada por el alcalde o su delegado, quien la presidirá; el secretario de ambiente o desarrollo rural, o la instancia similar, o su delegado; un delegado del Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC); un delegado de la Car respectiva; un experto de reconocida experiencia en la materia, designado por el gobierno municipal; dos expertos de reconocida experiencia en la materia, designados por el concejo municipal; dos expertos académicos especializados en el tema, designados por el sector académico del municipio.
Teniendo en cuenta que al otro lado del río “De la Vieja” ya funciona la RAP -Región Administrativa de Planeación- del Eje Cafetero, es conveniente crear nuestra COT cartagüeña para participar -así sea como veedores- en sus reuniones, porque manejará miles de millones de pesos para su inversión en obras de desarrollo, caso el Paisaje Cultural Cafetero, del que hacen parte varios de nuestros municipios. Y si los vecinos están aliados con Antioquia en uno de los O.C.A.D. (que repartirá otros tantos de las regalías en grandes obras), es de pleno sentido común pensar que la cosa es por ahí. Allí tienen el señor alcalde y los honorables concejales esta idea y… “a la orden”.
Esta misma Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial posibilita la creación de las P.A.P. -Provincias Administrativas de Planeación- con dos o más municipios geográficamente contiguos de un mismo departamento y por solicitud de sus respectivos alcaldes, con el propósito de organizar conjuntamente la prestación de servicios públicos, la ejecución de obras de ámbito provincial y la ejecución de proyectos de desarrollo integral, así como la gestión ambiental. Y esta idea podría ser para los que aspiran a ser elegidos como primeras autoridades de nuestros 18 municipios.
Obras como un acueducto provincial, un hospital de tercer nivel, una universidad pública, combo de maquinaria amarilla para la construcción y el mantenimiento de vías terciarias que faciliten llevar los productos agrícolas y pecuarios a los mercados y la promoción del turismo rural, con avistamiento de aves incluido, un botadero de basuras… ¿no son temas atractivos para recibir el voto de los norteños?
Coletilla: El Canal 1 anunció la continuación de la telenovela “El Sultán”. ¿Veremos la batalla de Lepanto cuando asuma Selim, el sucesor? A un niño le preguntaron cómo se llamaba el autor de “El Quijote”. Lo apodaron el manco de Lepanto, le recordaron. “Ah… ya: Miguel De Una Mano”. (Hubo un homónimo de apellido Unamuno).
Gustavo García Vélez | CiudadRegion
Nota aclaratoria: las opiniones de los columnistas son de su estricta responsabilidad y no representan la opinión de este portal.
La temporada de lluvias en Risaralda está dejando graves consecuencias en los 14 municipios del…
En un esfuerzo por mejorar la seguridad en el Valle del Cauca, la gobernadora Dilian…
La construcción de la doble calzada Calarcá-La Paila sigue siendo motivo de debate entre los…