El País | Cali | 04 FEB 2016 – 7:47 am
En La Unión, La Victoria y Zarzal, se hace necesario aumentar el número de policías. Esta fue una de las conclusiones del Consejo de Seguridad efectuado en Cartago el pasado 20 de enero con los alcaldes y demás autoridades de municipios del norte del Valle.
Ese día la gobernadora del Valle Dilian Francisca Toro le pidió al coronel Camilo Ernesto Álvarez, comandante de Policía del departamento, que aumente los cuadrantes.
“Le pedimos al Coronel que aumente el número de policías que puedan lograr desarticular unas bandas delincuenciales que se encuentran ahí, y que podamos mejorar la seguridad en estos municipios”, dijo en el consejo la Gobernadora.
El sentir de las nuevas administraciones de estos municipios tuvo eco en la Gobernación, pero en estos municipios esperan que no se quede en promesas.
Por ejemplo, en Zarzal, el viernes 22 de enero una señora de 78 años resultó golpeada en su propia casa por desconocidos que hoy la tienen entre la vida y la muerte, la situación es complicada, esto porque solo hay 18 policías, muy pocos para los 45 mil habitantes; es decir que por cada 2.500 habitantes hay un uniformado.
En este municipio, según el secretario de gobierno Óscar Marino Libreros, el año anterior se presentaron 21 asesinatos y hay un alto índice de agresiones y de riñas.
“En 2014 fueron atendidas 85 lesiones comunes producto de riñas y para 2015 fueron 116, de manera que aumentó. En homicidios en 2014 fueron 22 y el año anterior 21”. indicó el funcionario.
Óscar Marino Badillo ganó las elecciones con un amplio margen. A esto se le suma que mientras en 2014 no se presentó ninguna denuncia por extorsión, el año pasado se dieron 11 casos, por lo cual según autoridades del municipio se cree que podría tratarse de alguna banda delincuencial que está haciendo de las suyas en el m unicipio.
Los otros dos municipios donde la gobernadora Dilian Francisca Toro pidió aumentar el pie de fuerza son La Victoria y La Unión, separados por apenas 15 minutos en carro. En estos dos pueblos aunque sus habitantes dicen no temer por su vida como en los años 90 y parte del 2000, cuando el temido cartel del Norte del Valle tenía fuerte presencia, tal parece que si las autoridades no le ponen mano, la situación se puede salir de control.
En La Victoria en lo que va corrido del año se han presentado dos homicidios. “El más reciente el de un joven de 18 años por el sector del estadio, un sector crítico con salida para La Unión” explica el secretario de Gobierno de esta municipalidad, Carlos Mauricio Peña.
Y aunque las autoridades no han hecho público qué bandas operan en esta zona, se conoce por los constantes reportes de capturas que ‘Los Flacos’ estarían extendiendo su brazo hacia estos municipios, así como a Obando.
En La Unión quizás la preocupación es mayor. Allí la administración recién llegada dice que recibió un municipio resquebrajado en materia de seguridad.
El año anterior fueron 40 los homicidios, nueve más que en 2014 y en lo que va corrido de este año ya son cuatro las víctimas mortales.
“Por eso el día que se hizo el Consejo de Gobierno La Unión fue catalagado como uno de los más violentos del norte del Valle”, dice el encargado de Gobierno, Cristian Herrera, para quien la presencia de más policía, así como del Ejército es vital.
La Unión tiene 39 mil habitantes y solo 24 policías, lo que indica que por cada 1625 habitantes hay un policía, promedio mucho mejor que el de Zarzal; sin embargo sigue siendo muy bajo.
A eso se le suma que en materia de tránsito no hay autoridad que controle y sobre todo que eduque para prevenir la accidentalidad, otra de las afectaciones que tienen los pueblos del norte y en la que también hizo anuncio la Gobernadora.
“Con el apoyo de la Policía se creará la autoridad departamental de tránsito para lograr que los municipios que no cuenten con secretaría de tránsito, ni autoridad de tránsito, tengan un apoyo efectivo en esta materia”, afirmó la mandataria.
Así que en estos tres municipios, donde sumados sus habitantes llegan a 100 mil y en policías no llegan a los 60, se espera que por lo menos los uniformados superen los 100 y sobre todo que se reduzcan los homicidios y otro tipo de delitos.
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