La Universidad del Valle ya tiene diseñados sus protocolos de bioseguridad para garantizar la continuidad educativa durante el segundo semestre.
El rector Édgar Varela, señaló que se tuvieron en cuenta dos posibles escenarios bajo los protocolos de bioseguridad, que plantean clases presenciales, virtuales y combinadas en las 11 sedes.
«Hemos construido un protocolo de 10 puntos que establece los mecanismos para que los estudiantes y profesores podamos volver a los campus. Hemos pensado en implementar el ‘pico y código’, en donde unos estudiantes ingresarían lunes, miércoles y viernes, otros martes, jueves y sábados», explicó el Rector.
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El plan contempla hacer bloques de clases para que los estudiantes no estén durante largos periodos en las sedes universitarias. «También hemos pensado en una tasa de ocupación de clases en donde si un grupo tiene 40 estudiantes, 20 o 15 asistirían a la clase presencial y se dividirían en tres turnos que rotarían a lo largo del semestre, de tal manera que se combine la presencialidad con el estudio virtual», indicó Varela.
En los protocolos de bioseguridad la universidad realizará control de biometría calórica en los accesos a los campus, la creación de una brigada estudiantil de bioseguridad y la puesta en marcha nuevamente de la brigada universitaria de riesgo, además de la dotación con guantes, tapabocas, gel antibacterial y alcohol.
En caso de que el nuevo semestre académico que se inicia en agosto no se pueda realizar de forma semipresencial y solo se pueda adelantar de manera virtual, la universidad perfeccionará durante el receso académico toda su plataforma tecnológica, para que todos los estudiantes tengan acceso de calidad a la educación.
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