Ante la grave situación provocada por la intensa temporada de lluvias, Tuluá declara calamidad pública para agilizar la respuesta a la emergencia. La decisión fue tomada en una reunión extraordinaria del Comité Municipal de Gestión del Riesgo de Tuluá, el pasado 8 de enero, con el objetivo de implementar acciones urgentes y mitigar los efectos del invierno en el municipio.
Medidas inmediatas para mitigar la emergencia
La declaratoria de calamidad pública permite a la administración municipal disponer de recursos de manera más flexible y sin los procedimientos burocráticos habituales. Entre las medidas adoptadas se incluyen:
- Caracterización de personas damnificadas para la entrega de ayudas humanitarias.
- Remoción de escombros y material acumulado en zonas afectadas.
- Encauce del río para prevenir desbordamientos futuros.
- Fumigación y medidas sanitarias para evitar la proliferación de enfermedades.
Evaluación de infraestructura y obras pendientes
Uno de los puntos clave en la reunión fue la participación de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC), la cual se comprometió a realizar una inspección técnica sobre las obras ejecutadas en la parcelación Belén. Al parecer, dichas obras han alterado el flujo de aguas lluvias, lo que contribuyó a la emergencia en el sector Siete Vueltas. La CVC también anunció su disposición para colaborar en la reconstrucción del dique afectado.
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¿Qué implica la declaratoria de calamidad pública?
Desde 2012, alcaldes y gobernadores pueden declarar calamidad pública como herramienta para gestionar crisis derivadas de desastres naturales. Este mecanismo otorga mayor discrecionalidad en el uso de recursos, facilitando decisiones rápidas como:
- Asignación de fondos para reparaciones de infraestructura.
- Implementación de programas de ayuda humanitaria.
- Contratación de obras de emergencia sin los procedimientos administrativos regulares.
El gobierno municipal de Tuluá hizo un llamado a la comunidad para acatar las recomendaciones de las autoridades y mantenerse informados sobre nuevas disposiciones.
La situación sigue en monitoreo permanente por parte del Comité Municipal de Gestión del Riesgo, la CVC y organismos de socorro, con el fin de minimizar los impactos de la temporada de lluvias en la región.
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