La noche del 17 de febrero, la ciudad de Tuluá fue testigo de otro intento de incendio contra taxis, un patrón que se repite y que ha generado alarma en la comunidad. En esta ocasión, dos vehículos fueron el blanco de los delincuentes en los barrios La Esperanza y El Jardín.
Los conductores lograron controlar las llamas, evitando que los vehículos fueran consumidos por el fuego, pero el incidente no pasó desapercibido para las autoridades y el Cuerpo de Bomberos, quienes permanecen vigilantes ante posibles nuevas amenazas.
La rápida acción de un conductor en el barrio La Esperanza impidió que su vehículo fuera incendiado por dos individuos en una motocicleta, y las autoridades lograron capturar más adelante a uno de los presuntos responsables.
En otra situación en El Jardín, la comunidad frustró un intento de incendio cuando notaron a un individuo con una actitud sospechosa cerca de un taxi estacionado en una acera.
El secretario de Gobierno Municipal, Martín Hincapié, destacó la importancia de la labor de la fuerza pública y anunció la captura de una persona con elementos utilizados en este tipo de ataques, subrayando el compromiso de combatir a los actores criminales que han generado temor en la ciudad.
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Estos hechos se suman a una serie de eventos similares ocurridos en Tuluá donde quemaron varios taxis y motocicletas, lo que ha llevado a un refuerzo de los controles policiales, toques de queda, militarización de la ciudad, entre otras medidas.
El alcalde Gustavo Vélez recordó las medidas implementadas para mejorar la seguridad en Tuluá, como la restricción del horario de circulación de motocicletas y la regulación del polarizado en los taxis, acciones que buscan garantizar la tranquilidad de los ciudadanos y prevenir futuros incidentes.
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