En una hazaña médica sin precedentes en la región, un equipo multidisciplinario del Hospital San Jorge de Pereira realizó una exitosa cirugía intrauterina para corregir un defecto del tubo neural en una bebé de seis meses de gestación. Esta intervención compleja, liderada por la médica especializada en perinatología, Leydi A. Guzmán Polanía, permitió corregir un defecto que podría haber causado serias complicaciones al nacer.
Durante una ecografía rutinaria, se diagnosticó a la bebé con un defecto del tubo neural, lo que implica que la médula espinal no se cierra adecuadamente, formando una hernia. Esta condición puede llevar a la acumulación de líquido en la cabeza, conocida como hidrocefalia, y derivar en problemas motores y neurológicos graves. Ante este diagnóstico, la madre, Meyra Luz Moreno Guzmán, decidió continuar con el embarazo y buscar la intervención necesaria en el Hospital Universitario San Jorge de Pereira.
Proceso de la Intervención
El procedimiento quirúrgico, explicado por la doctora Guzmán, consiste en hacer una pequeña incisión en el útero, similar a una cesárea, para exponer el defecto en la médula espinal del bebé. Un equipo de neurocirugía corrige el defecto, tras lo cual se cierra nuevamente el útero, permitiendo que el embarazo continúe con normalidad.
«Se realiza una pequeña incisión a través del útero, al cual se ingresa como si fuera una cesárea por parte del equipo de medicina materno-fetal que expone el defecto del bebé para que el equipo de neurocirugía lo pueda corregir y, una vez corregido, nuevamente se cierra el útero y se le da continuidad al embarazo», explicó la doctora Guzmán.
Los beneficios de la intervención
La intervención, realizada con éxito, no solo permitió que la bebé naciera sin complicaciones, sino que también disminuyó la necesidad de procedimientos adicionales postnatalmente. Esta operación reduce los riesgos de infecciones, complicaciones y daño cerebral, además de evitar la colocación de una válvula de derivación ventrículo peritoneal.
Los principales beneficios de esta cirugía son:
- Mejora en las posibilidades de que el bebé pueda caminar espontáneamente.
- Disminución de la necesidad de usar muletas o sillas de ruedas.
- Mejor control de los esfínteres.
Después de la cirugía, Meyra Luz permaneció tres días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para monitoreo tanto de ella como de la bebé. La pequeña nació por cesárea a los siete meses y dos semanas de gestación y ha evolucionado favorablemente.
El éxito de esta intervención ha sido ampliamente reconocido. El gobernador de Risaralda, Juan Diego Patiño Ochoa, y el gerente del Hospital Universitario San Jorge de Pereira, Javier Alejandro Gaviria Murillo, elogiaron el alto nivel de especialización y la dedicación del equipo médico. «Situaciones como éstas demuestran la calificación del equipo científico al servicio de la institución y el alto nivel de especialización que se ha alcanzado para prestarle a los risaraldenses un servicio de salud con calidad y oportunidad, aun en situaciones tan complejas», señaló el gobernador Patiño.
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La madre, visiblemente emocionada, expresó su gratitud: «La niña ha evolucionado muy bien. Por ello quiero agradecer a los perinatólogos y los neurocirujanos del Hospital San Jorge de Pereira por todos los cuidados que tuvieron conmigo y con la bebé».
Esta intervención representa un avance significativo en la cirugía intrauterina en Colombia y pone de relieve la capacidad del Hospital San Jorge de Pereira para manejar procedimientos de alta complejidad, brindando esperanza y mejor calidad de vida a sus pacientes.
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