La creciente inseguridad en Buga ha dejado otra víctima en sus calles. Este sábado 9 de noviembre, una mujer que se desempeñaba como cuidadora de vehículos fue asesinada en plena vía pública mientras realizaba su labor cerca de la Basílica del Señor de los Milagros, un lugar emblemático en el municipio de Guadalajara de Buga, en el Valle del Cauca.
Este trágico suceso ha generado gran alarma entre los habitantes de la ciudad, quienes exigen a las autoridades, mayores medidas de protección y vigilancia ante tanta inseguridad.
El hecho ocurrió en la avenida del Milagroso, en la calle 4a, entre las carreras 16 y 17. La víctima, identificada como Jensy Jhoana Ramírez Monar, fue atacada por dos sicarios que se movilizaban en motocicleta y que abrieron fuego contra ella sin mediar palabra. Jensy Jhoana, conocida en el sector por su trabajo vigilando vehículos, perdió la vida de inmediato debido a los múltiples impactos de bala que recibió.
Los móviles y responsables del crimen son desconocidos, sin embargo, entre las hipótesis que manejan las autoridades podría estar relacionado con el no pago de las llamadas ‘vacunas’.
Este ataque se suma a otros hecho violentos en la zona histórica de Buga. En la misma semana, se reportaron otros dos crímenes: una persona resultó herida en un intento de robo en la carrera 13, entre calles 4a y 5a, y un robo fue registrado en una inmobiliaria en la calle 5a, entre carreras 15 y 16.
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Aumento de la inseguridad en Buga preocupa a la comunidad
La preocupación de la comunidad no se ha hecho esperar. Con más de 80 atentados en lo que va del 2024, de los cuales 70 han sido mortales y otros 15 han dejado heridos, el municipio de Guadalajara de Buga vive una situación de violencia que ha afectado tanto a sus residentes como a quienes visitan la ciudad. Los habitantes expresan sentirse “desprotegidos” y en constante temor por el aumento de los actos delictivos en la zona.
La comunidad ha alzado su voz, solicitando a las autoridades locales y al Departamento de Policía del Valle del Cauca que redoblen los esfuerzos para reducir la criminalidad en la región. Según algunos testimonios, la falta de medidas de vigilancia y el incremento de actos delictivos en Buga han puesto en jaque la tranquilidad de los residentes, quienes han sido testigos de múltiples ataques y robos en las últimas semanas.
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