Proteger la fauna y flora silvestre en diferentes sitios del Valle del Cauca y en especial en la zona amortiguadora del Parque Nacional Natural Tatamá, así como generar mejores condiciones a los productores de café de la zona, son entre otros los objetivos principales de dos importantes convenios firmados entre la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC y la Federación Nacional de Cafeteros a través de los cuales se aumenta la cobertura boscosa en el territorio.
A través de dos convenios con la federación nacional de cafeteros, la CVC busca la protección de la zona amortiguadora del Tatamá
Se trata de los convenios 013 y 055, cuyo objetivo principal es unir los pequeños bosques fragmentados, en uno solo, e insertar sombríos que protejan el suelo en siembras establecidas, utilizando semillas de árboles nativos de la zona, las cuales se reproducen en viveros que han sido instaurados previamente en municipios como Argelia, en donde se cuenta con más de 150 especies aptas para repoblar cientos de hectáreas que han sido afectadas por la tala para la expansión de cultivos.
“Una de las situaciones ambientales que hemos encontrado en estas áreas es la fragmentación de los bosques, debido a ello hemos empezado a implementar herramientas de manejo del paisaje, que consiste, en hacer cercas vivas, enriquecimiento de bosques y agroforestería en los corredores de conectividad, para que los animales puedan desplazarse libremente de las zonas bajas a las partes altas del bosque teniendo todos los relictos boscosos que existen”, explicó Luis Mario Millán, funcionario de CVC.
El funcionario recalcó que a través de este proyecto, además de aumentar la cobertura boscosa para el mejoramiento de las fuentes hídricas y la capa vegetal, se está garantizando los espacios necesarios para la fauna silvestre que cada vez se ve más amenazada por el hombre y se está apoyando para que los campesinos cambien la cultura de tala de árboles para la siembra de café.
Lo que se está haciendo es importantísimo porque en el caso de la fauna, le damos unos corredores para que se desplace perfectamente sin que tenga ninguna interacción directa con los humanos, estamos enriqueciendo la parte paisajística y es muy hermoso ver un área con estos corredores naturales y lo más importante es que el recurso hídrico lo estamos protegiendo”, agregó.
En este proceso la Federación Nacional de Cafeteros juega un papel muy importante mediante el trabajo y vinculación directa de sus productores o propietario de fincas que hacen su aporte cediendo algunos espacios que antes eran usados para la producción de café y alternando este cultivo con los sombríos de guamo y otros árboles.
“Lo que estamos haciendo es impactando el territorio, trabajando con los productores, donde ellos son los que directamente hacen la labor generando unos corredores de conservación permitiendo ver esto como un aliado en el que se pueda favorecer el campesino. Cuando el productor siembra un árbol dentro de un cafetal, se está reduciendo la cantidad de fertilización al año, la cantidad de limpias al año, el tamaño del grano es más representativo y lo más importante, estamos haciendo un gran trabajo en el recurso suelo”, agregó por su parte, Diego Castaño, funcionario de la Federación Nacional de Cafeteros.
Para los campesinos propietarios de los predios beneficiados, la conexión de los bosques y establecimiento de los sistemas agroforestales y corredores biológicos, son una experiencia bonita y favorable desde lo ambiental y económico, pues se benefician en la calidad de aire y de agua, evitan las erosiones en sitios pendientes y mejoran sus ingresos.
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