La violencia sigue azotando la zona rural de Tuluá, Colombia, dejando más muertes en su estela de dolor.
Este miércoles 26 de julio, dos hombres perdieron la vida a manos de despiadados asesinos en dos ubicaciones distintas, sumiendo a sus familias y a la comunidad en un profundo luto.
En el corregimiento de Aguacalara, uno de los lugares afectados por estos actos de violencia, fue asesinado un miembro de la Policía Nacional. El oficial, identificado como José Sánchez Girón, formaba parte de la Base Antinarcóticos y contaba con 11 años de servicio en la institución, se encontraba en la vía que conecta al corregimiento de Tres Esquinas, específicamente en la vereda El Cairo, cuando fue víctima del ataque a balazos que terminó con su vida de manera trágica.
El Coronel Ever Gómez, Comandante del Departamento de Policía Valle, reveló que el uniformado fue sorprendido por los agresores mientras se desplazaba en una motocicleta, y fue blanco de disparos en repetidas ocasiones, lo que acabó con su vida en un acto cruel y cobarde.
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En otro caso ocurrido este mismo miércoles en Tuluá, en el callejón El Delirio del corregimiento de Aguaclara, otro joven perdió la vida ese mismo día. Wilmer Humberto Ortiz Ospina fue asesinado de manera violenta y, a pesar de los esfuerzos por trasladarlo a un centro médico, lamentablemente sucumbió a sus heridas.
La comunidad se encuentra consternada por estos recientes acontecimientos y se espera que las autoridades del municipio de Tuluá brinden información adicional sobre estos homicidios, en un intento por esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.
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