El Espectador | Bogotá D.C. | 27 SEP 2014 – 7:49 am
Autoridades del departamento de Risaralda pusieron al descubierto un macabro caso de explotación sexual en la región, protagonizado por dos mujeres que utilizaban una tienda como fachada para ofrecer a menores de edad.
El hecho se presentó en el municipio de Mistrató, donde fueron capturadas María Cielo Gallego y Ana Patricia Ramírez Cano, sindicadas de inducir a la prostitución a menores que previamente reclutaban y encerraban en una vivienda de la vereda Quebrada Arriba, donde funcionaba una tienda de víveres como fachada.
De acuerdo con la investigación adelantada por la Fiscalía, las mujeres engañaban a las niñas y tras someterlas en la casa, las retenían durante meses para que sostuvieran relaciones sexuales con varios hombres.
“Llevaban a las jóvenes con engaños y promesas económicas falsas, luego las encerraban durante meses, tiempo en el cual las obligaban a tener relaciones sexuales durante el día con varios hombres, todo esto bajo los efectos del alcohol que les era suministrado por las mismas mujeres”, relató el ente investigador durante la audiencia de imputación de cargos.
El sitio donde funcionaba la red de explotación sexual fue descubierto por las autoridades gracias a una de las jóvenes, quien llamó a sus familiares en un descuido de las mujeres y los alertó de lo que estaba pasando.
“El llamado en secreto de una de las víctimas a sus familiares permitió conocer su ubicación exacta, ya que durante el tiempo que estuvo cautiva no se le permitió comunicarse con nadie y si lo hacía era obligada a decir mentiras, mientras se le amenazaba con arma blanca”, precisó la Fiscalía.
Tras las revelaciones, un juez de control de garantías ordenó la reclusión de María Cielo Gallego en un centro carcelario, mientras que se le otorgó prisión domiciliaria a Ana Patricia Ramirez por cuenta de una incapacidad física durante las audiencias preliminares.
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