El Ministerio del Transporte a través de la Inspección Fluvial Calima Salvajina ordenó la suspensión del paso vehicular por el puente flotante o planchón, ubicado en el sector de El Alambrado, entre los departamentos del Quindío y Valle del Cauca, que entró en funcionamiento hace una semana.
Esta medida ha generado un debate acalorado debido a que según la entidad gubernamental, la empresa Servicio de Ferry y Carga Ltda. quien está a cargo de operar el servicio carece de una autorización formal para hacerlo.
En este sentido, el alcalde de La Tebaida, José Vicente Young Cardona, recibió la orden donde ordena iniciar la suspensión del servicio que presta el puente flotante hasta que se completen los trámites administrativos necesarios para obtener la autorización correspondiente. Sin embargo, el mandatario ha expresado su negativa a acatar dicha orden, argumentando que no se ha seguido un debido proceso y que el documento carece de fundamentos legales sólidos.
Uno de los puntos de conflicto es el tema de las tarifas. Desde que el puente flotante comenzó a operar hace apenas una semana, se han aplicado tarifas que muchos conductores consideran excesivas, 30 mil para vehículos livianos, 40 para camiones turbo y 60 mil pesos para vehículo más pesados. Así pues, la falta de regulación en estos precios ha sido motivo de críticas por parte de la comunidad, que ha expresado su descontento por los costos elevados que deben afrontar para utilizar el servicio.
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Por otro lado, el alcalde Young ha destacado que el puente flotante se encuentra en un área que abarca dos jurisdicciones municipales: La Tebaida, en el Quindío, y Sevilla, en Valle del Cauca. Esto ha llevado a una situación complicada, ya que el alcalde no tiene autoridad sobre el municipio vecino y ha argumentado que no se ha ofrecido una solución satisfactoria a los problemas económicos y sociales generados por el colapso del puente de El Alambrado.
A pesar de las presiones y la orden de suspensión, el alcalde Young ha dejado claro que el puente flotante continuará operando. «No voy a acatar la orden de suspensión, no voy a suspender ese servicio, la gente lo puede seguir utilizando, vamos a hacer unas visitas para garantizar la seguridad, y le advierto que me pueden venir a sancionar, si quieren, pero el puente flotante, que presta este valioso servicio, seguirá funcionando».
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En su defensa, destaca la importancia del servicio que ofrece el puente flotante como una solución viable y necesaria para la comunidad.
El alcalde José Vicente Young, selañó que si es necesario se reune con el empresario y representantes del Ministerio de Transporte para buscar un punto de equilibrio. Así mismo, hizo un llamado al gobernador del Quindío para analizar esta solicitud y pidió al gobierno nacional que no suspenda el paso por la plataforma o planchón.
La controversia en torno a la suspensión del servicio del puente flotante sobre el río La Vieja parece lejos de resolverse. Mientras tanto, los usuarios y la comunidad en general esperan que se encuentre una solución pronta y efectiva que permita restablecer el paso vehicular de forma segura y a tarifas razonables.
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